Confunden a Álvaro Uribe Vélez con un simple gatico

Cuando depositamos nuestro voto la primera vez por Juan Manuel Santos, estábamos convencidos de que poseía cualidades que lo separan de otras ideologías de acuerdo a lo que demostraba en sus artículos y que además poseía inteligencia, amor y dominio de aquello que pregonaba; pero desde su posesión nos mostró su lado oscuro que desarrollaba desde hacía rato con sentimientos de envidia, celos y odio en contra de Álvaro Uribe Vélez.

La vanidad, el alarde y el delirio de grandeza no le permiten al huésped de la casa de Nariño darse cuenta del grave peligro que entraña seguir coartando la libertad ciudadana al no presentar los 75 puntos del acuerdo de “justicia transicional” firmado en la Habana. Sin que pasaran los días, se hizo evidente la confusión, y por igual el fastidio del pueblo, pues desde el gobierno nacional siguen dando informaciones amañadas.

El gobierno del presidente Santos no le ha importado la gravedad de lo acontecido, al firmar en blanco un documento al cual le acomodarán todos los entuertos y sapos que creen las farc y él, nos tragaremos los colombianos; por el atropello al suscribir dicho documento. En ese sentido, el gobierno transita una vía inconstitucional que seguramente se la irá de las manos más temprano que tarde.

Este es un hecho grave: primero, por la falta de transparencia y equidad en el proceso y, segundo, por la falta de ética al aprovechar el paso del Sumo Pontífice por Cuba y los Estados Unidos para presentar una de las veladas de su circo, y la complejidad surge, cuando gobierno y farc, tratan de extirpar la verdad que se empina como nuestras escarpadas montañas ante la desforestación e indolencia que sufrimos los colombianos que anhelamos la paz pero con respeto y autoridad.

A falta de madurez y haber llegado a la vejez, ha llevado a languidecer a un secretariado de las farc, que nunca supo aprovechar las coyunturas sociales que varios gobiernos les brindaron incluyendo el de Álvaro Uribe Vélez, pues ellos siempre han estado alejados de las masas.

Recordemos que el divorcio existente de nuestro sistema jurídico, por falta de su real aplicación, se remonta al tiempo del gobierno de Seguridad Democrática, cuando se les descubrió a algunos magistrados que posaban de honorables, sus andanzas con Giorgio Sales, con evidencias suficientes y creíbles.

La izquierda no pasó de ser romántica, copiando propuestas políticas que de Cuba y ahora de Venezuela que nunca dieron resultados aquí; quieren la cabeza de Álvaro Uribe Vélez confundiéndolo con un simple gatito, cuando es un verdadera pantera!.

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