EL VENDEDOR DE ILUSIONES

Similar a una pesadilla, a lo largo de 50 años, hemos sufrido crueles ataques por parte de las Farc en el campo, también en las ciudades, que han dejado miles y miles de muertos en nuestro país. Los vientos de rescate de la democracia empezaron a sentirse en su máximo esplendor, cuando se quedó en la mente, en el alma y en el corazón del pueblo, la semilla sembrada por Álvaro Uribe Vélez al llegar al solio de Bolívar con su política de Seguridad Democrática.

Lastimosamente la interrupción violenta de este proceso lo presentó el Presidente Santos cuando inició la entrega de nuestro país al presentar al congreso el proyecto del tal “Marco Jurídico para la Paz”. La mayoría de los medios de comunicación se plegaron a esta orden de palacio, al igual que la mayoría de congresistas y dieron a luz este esperpento, buscando desde ese momento la reelección del Presidente Santos, sin importar para nada la suerte de soldados, policías y gente de los pueblos que han sido masacrados en forma feroz y aleve, desde que se inició la comedia cursi que a diario presentan en La Habana.

Ahora es cuando debemos luchar por nuestra libertad, es ahora, porque hemos sido engañados, no solo por el Presidente Santos, sino por un poder judicial que todos los días demuestra ser un vocero mas del Socialismo Siglo XXI, situación que acarrea complicaciones en el orden institucional, ocasionado por “importantes” miembros del congreso y algunos magistrados envueltos en escándalos, por su manera de actuar, que se contraponen con las responsabilidades de los cargos que ocupan, con decisiones y posiciones amañadas, olvidando el derecho, despertando el contagio en entidades y poblaciones, quienes atraídos por la magia envolvente de la apetencia de poder, motivados por la mermelada, presentan a diario escenas de doble moral.

En honor a la verdad histórica, lo único positivo que salió a flote de este gobierno, fue que a partir del año 2010 en que se posesionó, comenzaron activamente a gravitar en la mente de los colombianos el reconocimiento al expresidente Álvaro Uribe Vélez a quien hemos visto preocupado por la forma como actúa el gobierno Santos, arrodillado ante los “plenipotenciarios” de las Farc en La Habana, quienes lo insultan con versos, amenazas directas, derrumbe de torres de energía, helicópteros, bombas en diferentes poblaciones, muertes, excusas indescifrables respecto a la incapacidad para conducir el desastre propiciado: resultado obvio de una política nacida  del capricho y orientada por el fanatismo.

Con el voto el próximo 9 de marzo, se tiene la oportunidad de acabar y enterrar la tal “unidad nacional” del vendedor de ilusiones, proyectadas desde su mente de jugador de póker. Es la auténtica posibilidad que se nos presenta al CENTRO DEMOCRATICO de concretar una decisión popular, y que ese día servirá de grito de libertad para nosotros, y también para quienes nos miran desde el exterior derrotando a Juan Manuel Santos, la fuerza de la mentira.

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