Jefe del Comando Sur dijo al Congreso estadounidense que la guerrilla compró armamento antiaéreo. El gobierno de Estados Unidos confirmó que las FARC han adquirido misiles capaces de derribar aeronaves, con lo que estarían intentando equilibrar el conflicto que la Fuerza Pública ha ganado desde el aire.
Durante una audiencia en el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, el jefe del Comando Sur, general John Kelley, aseguró que esa guerrilla, que hoy sostiene un proceso de paz con el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, tiene en su poder misiles tierra-aire que ha logrado comprar con recursos de su actividad ilegal.
“Los cientos de millones de dólares que reciben las FARC solo del narcotráfico les permiten comprar misiles tierra-aire y financiar la construcción de narcosubmarinos”, aseguró Kelly en un documento que entregó al Congreso durante la audiencia, en la que se revisaron las prioridades del Comando Sur para el 2013.
En el mismo informe, el general Kelly dice que las FARC dependen “del narcotráfico, la extorsión y el secuestro” para financiar su guerra contra el Estado.
Y no obstante el proceso de paz que se adelanta en La Habana (Cuba), el alto oficial considera que el conflicto interno “está lejos de terminarse” y que “un acuerdo en la mesa de negociación no está garantizado”.
Después de la audiencia en la Cámara, el coronel Gregory Julian le reiteró a InsideDefense.com, publicación especializada en temas de defensa, que esa guerrilla ya cuenta con ese tipo de armamento. “Puedo confirmar que las FARC han adquirido misiles tierra-aire”, sostuvo.
Lo que todavía no saben las autoridades colombianas ni las estadounidenses es el número de misiles tierra-aire que ha logrado adquirir esa guerrilla. Desde hace tres años, las FARC han buscado tener este tipo armas para equilibrar la balanza de la guerra. Incluso, en diciembre del año pasado, el Ejército incautó en Morales (Cauca) dos misiles tierra-aire Sam7; sin embargo, puso en duda que la guerrilla tuviera la capacidad para operarlos. Luego se conoció un video en el que guerrilleros entrenaban con este tipo de armamento.Después de su creación como portátil durante la Segunda Guerra Mundial, los misiles Sam7 son usados principalmente en el conflicto de Afganistán, por lo que el Ejército investiga si las Farc hicieron una compra a la red terrorista Al-Qaeda, que tiene decenas de unidades en su poder, según el gobierno de Estados Unidos.
De acuerdo con David Spencer, de la Universidad Nacional de Defensa, si las FARC tuvieran una cantidad significativa de estas armas podrían cambiar el rumbo del conflicto. “Solo hay que mirar lo que pasó en El Salvador”, le dijo Spencer a Inside Defense, en referencia a cómo las guerrillas en ese país lograron derribar 5 helicópteros a finales de los 80, forzando a la Fuerza Aérea a reducir la cantidad de operaciones y limitar el apoyo a las tropas en tierra.
