El presidente Santos y sus delegados en La Habana y quién sabe dónde más, son expertos en hacer piruetas verbales para un día decir una cosa y, al otro, decir otra, diametralmente opuesta, con tal de que no fracase el proceso de negociación con los grupos guerrilleros, que a su vez negocian con drogas ilícitas y hacen terrorismo. ¿O no lo será que el Eln haya ejecutado sumariamente a doce miembros de la Fuerza Pública y a un soldado en Anorí que vigilaban el proceso electoral? Paz en sus tumbas y solidaridad con sus familias.
¿Cómo afirma Santos que las del domingo fueron las elecciones más pacíficas de los últimos tiempos? Él tenía que estar informado. ¿Será que no ejerce el mandato Constitucional de ser el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas? Esa es la impresión. No debe ser de buen recibo entre los violentos que el Presidente cumpla dicho mandato, como es debido. Por eso será que ya está hablando de un cese el fuego bilateral desde el primero de enero de 2016.
Por eso será que promueve una reforma constitucional, violando los procedimientos establecidos, para aprobar lo acordado en La Habana y quién sabe dónde más a pupitrazo limpio. Que quiere un Congresito elegido a dedo, varios de cuyos miembros serían guerrilleros. Claro, no habría voces disidentes. Con razón el expresidente Pastrana renunció a la Comisión Asesora de Paz. De ahí a caer en una dictadura a la venezolana o la cubana no hay ni un paso. ¿Es eso lo que queremos para Colombia?
Y que no digan que opto por la guerra y no la paz. Repito: quiero una paz construida entre todos los colombianos, en el marco de un Estado de Derecho, de libertad y pluralismo, con apego a la Constitución y las leyes. Con penas blandas, pero sin impunidad, para los narcoterroristas que han cometido crímenes de lesa humanidad y violaciones al DIH. Para el guerrillero raso, mano generosa y apoyo de toda la sociedad civil para que se reinserte a la vida en democracia, tenga igualdad de oportunidades, empezando por estudio y un trabajo digno. ¿Nos tendremos que meter la mano al dril? Claro que sí. A Colombia la encarrilamos hacia la equidad entre todas las personas de buena voluntad y generosidad o Santos y sus camaradas de la extrema izquierda mundial nos la encarrilan hacia el comunismo. Así de simple y así de complejo.
Con razón el expresidente Uribe vuelve a proponer que los guerrilleros se concentren en 2 o 3 sitios de Colombia, por un tiempo definido previamente y con vigilancia y veeduría nacional e internacional y que los acuerdos sean llevados al constituyente primario, para su aprobación o improbación. Lo otro es entregar el poder popular a quienes, como borregos o parte interesada, dirán sí a todas las reformas, no importa que sean inconstitucionales. Tampoco, que acaben con el Estado de Derecho y con nuestra democracia, perfeccionable y mejor que una dictadura sin libertad responsable, como pasa en Venezuela, y en Cuba, cuando en 1960 los hermanos Castro y el Che Guevara declararon que la isla seguiría el modelo comunista de la Urss.
La mayoría del pueblo colombiano no cree en la guerrilla. Por eso Santos y sus amigos quieren imponernos el “mico”, como lo llamó Claudia López. Actuemos por el bien de los niños de hoy y de mañana. Dejemos esa indolencia que hiere y participemos en la construcción de una Colombia digna, con una justicia proba, cumplidora de la ley y equitativa.
PD: Ojalá Luis Pérez gobierne bien a Antioquia, rodeado de un gabinete pulcro. Felicitaciones a Andrés Guerra que en setenta días logró tanto y ahora da las gracias a las miles de personas que por él votamos. Sé que seguirá trabajando por una tierra que ama y que llegará muy alto. Lástima que el CD se tardó tanto en darle el aval. Tenemos un excelente alcalde electo, Federico, Fico, Gutiérrez, quien hizo su campaña paso a paso, oyendo al ciudadano y con muy poco apoyo económico. Con él ganó el voto de opinión. Felicitaciones al CD, el grupo político con el mayor número de diputados a la Asamblea del departamento, de concejales en Medellín y de ediles en las JAL.
