Bastante flojo el inicio de campaña de Juan Manuel Santos. Para empezar el sitio: un salón comunal de un barrio de clase media de Bogotá que no se llenó a pesar de que al evento asistieron todos los figurones de la Unidad Nacional.

¿Y el discurso? Pareció más para el lanzamiento de una campaña por al Alcaldía de Bogotá que para la Presidencia de la República. Lleno de lugares comunes y de promesas que en realidad son obligaciones constitucionales o legales como la financiación del Metro o los aportes para la seguridad ciudadana, la educación o la salud.

Después de 4 años de no hacer gran cosa por Bogotá, el Presidente se acordó que es bogotano. Más vale tarde que nunca, pero hubiera sido bueno que apoyara su catálogo en propuestas originales y no en programas en marcha como todo el paquete de infraestructura del que tanto presumen tanto el Presidente Candidato como su fórmula vicepresidencial y cuyo aporte no ha sido más que el estorbo para su aprobación en el Concejo de la ciudad.

Al final del evento me quedó una duda: ¿Cual es el puesto que busca Juan Manuel Santos, la Presidencia de la República o la Alcaldía de Bogotá? De pronto ambos, como me respondió un tuitero.