Del muelle “Fundación buen gobierno”, zarpó un barco llamado “Casa de Nariño”, cargado de “pollitos”, según el pollo mayor Armando Benedetti. No imaginaron los responsables de la dirección del barco, el papá de los “pollitos”, Juan Manuel Santos, y su contramaestre Vargas Lleras, que la nave podría zozobrar en alta mar, al encontrarse con un mar embravecido, con olas de tsunami. Al interior de la nave, viajan animales de todos los pelambres, con “pollitos” de granjas diferentes: la casa Samper, Fernando Cristo, Simón Gaviria, Roy barreras, los hermanos Galán, Silva Luján, Óscar Naranjo, conservadores santistas: Efraín Cepeda, Roberto Gerlein, Juan Gabriel Uribe, Hernán Andrade, Luis M Sierra, y Jorge Castro. Horacio Serpa, Camilo Sánchez, Lucho Garzón el recreacionista, Antanas Mockus- ave de mal agüero, desleal y egocéntrico. Todos, gallos capón. Los “petristas”, Iván Cepeda del polo. Gallinas viejas y cluecas: Vivian Morales, Ángela Robledo y Myriam Paredes. Mezcolanza política variopinta, pegados con mermelada viajando juntos en el remedo Arca de Noé.
El papá de los “pollitos”, dueño de sus dominios y del poder dominante, se resiste a salir de su camarote a cubierta por el temor de entrar en una olla de presión para responder por el proceso en La Habana en materia de paz, los 12 millones de dólares del narco “comba”, la reforma de la educación, de la justicia, de la salud- ignoradas, el problema agrario, la corrupción política. Con toda esta carga pesada llena de “pollitos”, gallos viejos resabiados, gallinas cacaraqueando, buscando nido para poner, empezó a navegar sin contratiempos la nave “Casa de Nariño”, confiada que podía regresar a puerto seguro donde los esperaban un comité de aplausos hincados de rodillas coreando la travesía. Pero no contaba el papá de los “pollitos”, candidato- Presidente Santos, y su contramaestre Vargas Lleras, que el viaje se viera perturbado por una tormenta en alta mar que amenazara hundir la nave hasta peligrar su tranquila navegación.
El barco “Casa de Nariño”, se encontró en el camino con otras naves que parecían rezagadas, comandadas por Óscar Iván Zuluaga, Martha Lucía Ramírez, Clara López y Enrique Peñalosa, identificadas con sus banderas izadas en lo alto de su mástil, repuntando por tener comandantes conocedores de la carta de navegación, y con brújula en mano ubicaron el norte navegando con seguridad sobre aguas procelosas, y el viento del Estado en su contra, con camarotes llenos por el CNE, la Fiscala, Concejo de Estado, alcaldes, gobernadores, prensa capitalina, radio y Tv, atiborrados de mermelada, hacen el lento navegar del barco advirtiendo su inminente hundimiento. Para evitar la tragedia, se llama a César Gaviria, capitán redomado, para que enderece el rumbo de la nave, evitar el fracaso del crucero, y garantizar el regreso al puerto de partida “buen gobierno”.
El capitán Gaviria, en lugar de conciliar el alboroto de los “pollitos” al interior de la nave, cacaraquea a nombre del papá de ellos, mostrándose como bribón de alta mar, emplaza a Álvaro Uribe para que entregue a la Fiscalía las pruebas sobre el ingreso de dólares a la campaña Santos / 2010. El saldrá con los estribillos “rojo- dale rojo”, o, “liberal vota liberal”, publicidad trasnochada. Coloca el Estado a favor de Santos sin escrúpulo. Para él, el fin justifica los medios. ¡Alerta las otras campañas¡. En lugar de clarificar la denuncia del narco “Comba”, sobre los 12 millones de dólares, le interesa el hacker Sepúlveda del cual hay millones en el mundo sin tumbar gobiernos. La justicia de USA llamó a JJ Rendón para que clarifique lo del narco “Comba”, obtener beneficios por colaborar, porque nuestra Fiscalía desestima la denuncia. ¿Estaremos frente a otro 8.000 desde USA?
