El caso Samper

El nombramiento de Ernesto Samper como secretario general de Unasur fue aplazado indefinidamente. La noticia se dio dos días después de que los periódicos nacionales transcribieran apartes del libro “Ya no quiero callar” escrito por Aura Lucía Restrepo, quien en su calidad de amante de Gilberto Rodríguez declara sobre la estrecha relación del expresidente con el clan mafioso del Valle del Cauca y ratifica la financiación que le dio al entonces candidato a la presidencia. No es la primera vez que el fantasma de los Rodríguez se le aparece a Samper; Uribe lo nombró embajador en París y eso le costó la relación con Andrés Pastrana quien ante el anuncio de ese nombramiento renunció airado a la embajada en Washington creando un conflicto bien incómodo que terminó con los dos expresidentes fuera de la nómina diplomática.

En Bogotá son frecuentes los chismes sobre los desplantes que se le hacen a Samper en los cocteles a los cuales todavía se empeña en ir. Es muy excepcional el rechazo generalizado de la sociedad colombiana a Samper pues la memoria colectiva suele ser olvidadiza y selectiva, pero en este caso persiste el rencor contra quién vendió a la mafia la mayor dignidad del país: la Presidencia de la República. Los jóvenes que nacieron en 1992 ya han votado y no conocen de primera mano lo ocurrido, pero no gustan de él.

Aun cuando no vivieron el retiro de la visa al Presidente de Colombia ni la compra descarada de la absolución por el Presidente en el Congreso, ni la vergonzosa intromisión del gobierno en la justicia para tratar de ocultar hechos que a pesar de todo salieron a la luz pública, el fastidio de sus padres por el personaje parece haberse transmitido a esa generación. Interesante caso de estudio pues es único en la historia de Colombia: la sociedad que perdona y olvida los peores crímenes de la guerrilla o parece insensible ante el saqueo de Bogotá ha castigado con el ostracismo a Samper por haber vendido la dignidad del país. Ese mensaje nos anima a creer que algo de dignidad  queda por rescatar en esta patria.

Share on facebook
Facebook
Share on google
Google+
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
LinkedIn

Buscar

Facebook

Ingresar