No nos equivoquemos

En esta campaña política, en la que se juega el futuro de Colombia, en la que tenemos que escoger entre los candidatos de la continuidad con afianzamiento del caos en el que nos tiene metidos Juanpa (como le gusta que le digamos), me ha tocado recorrer muchos de los municipios del departamento en apoyo a los candidatos del cambio. No nos podemos equivocar.

En algunos municipios le pregunto a la comunidad: ¿ustedes creen que el país va bien? La respuesta unánime es siempre un no rotundo. Vuelvo a preguntar: ¿ustedes creen que los candidatos de Santos serán los que nos puedan sacar adelante? Claro que la respuesta de la gente es otra vez un no rotundo.

En Antioquia, el candidato de Juanpa (como le gusta que le digamos) es Luis Pérez Gutiérrez, exalcalde de Medellín.

Recordemos quién es Luis Pérez y qué hizo en esta ciudad. Dicen que es un ejecutor de obras. Es cierto, construyó el cable que nace de una iniciativa de Sergio Naranjo en su alcaldía. Construyó el parque de Los Deseos, siguiendo lo que se hizo con el parque de Los Pies Descalzos, construyó la Plaza de la Luz y la biblioteca de EPM. Todo muy bien y acertado.

A la vez, puedo decir que es un destructor de políticas y obras de sus antecesores: acabó con el Instituto Mi Río, una entidad que dio muestras de eficiencia y de soluciones para muchos de los problemas de la ciudad. En 1988 se presentaron inundaciones en toda la ciudad. Con el Instituto, se limpiaron todas las quebradas de Medellín de las basuras que irresponsablemente tira la comunidad a sus cauces, de allí en adelante, a pesar de los fuertes inviernos, la ciudad no volvió a padecer de inundaciones hasta que hace unos dos años, que por falta de limpieza, se volvieron a presentar.

A los venteros callejeros se les empezó a dar una solución digna; se adecuaron locales con servicios sanitarios, con restaurantes, con locales individuales, en sitios de tránsito de buses, con todas las condiciones para que pudieran ejercer su oficio dignamente. Eran los Bazares que Luis Pérez acabó, dejó invadir el de Los Puentes para que lo ocuparan los vendedores de droga y lo aprovecharan los delincuentes. Miren lo que pasa ahora en Medellín con las vías invadidas por vendedores y el desorden por causa de esa mala política.

Trató de acabar con el 123, ahora utilizado en todo el país. Acabó con el sistema de valorización y apenas ahora se vuelven a dar soluciones con este sistema. Acabó con el tránsito y el control en las calles por haber despedido más del 50 % de los guardas. Desde ese entonces persiste el caos. Construyó una reja alrededor del estadio Atanasio Girardot, la que hubo que tumbar con grave deterioro patrimonial. Una torre del ¿ajedrez? que no ha servido para nada.

Es el único alcalde por elección popular que ha tenido tres gerentes de EPM. El alcalde de la vajilla. El alcalde que bajó las tarifas y que, por eso, ahora le imponen una multa altísima a EPM.

Ese es el gobernador que quiere Juanpa (como le gusta que le digamos) para que acabe con la Antioquia que tanto le incomoda.

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