A la representante a la Cámara del Centro Democrático le salió contradictor en su propio partido. Detrás de esta discusión histórica estaría la lucha por los votos uribistas para el Senado. Así es el debate entre dos 'pesos pesados' de la colectividad de Álvaro Uribe.
Dos de los congresistas más reconocidos del Centro Democrático, y al mismo tiempo de los más polémicos por sus posturas políticas, se enfrascaron este martes en una confrontación histórica al interior del partido por cuenta de la masacre de las bananeras. Eso sí, la discusión no deja de tener tintes electorales, pues ambos se disputan los votos uribistas para lograr un cupo en el Senado ahora que la lista es abierta.
Se trata de José Obdulio Gaviria, quien busca reelegirse en el Senado, y de María Fernanda Cabal, que quiere dar el salto desde la Cámara a esa misma corporación. Los dos, por supuesto, tienen argumentos distintos y buscan mantener la distancia para evitar la polarización. No obstante, ya dejaron planteado el debate y con bastantes visos de seguir creciendo.
El que comenzó esta vez la discusión fue Gaviria. De forma directa, y basándose en lo que considera son hechos históricos irrefutables, el senador aseguró que la masacre de las bananeras, ocurrida en diciembre de 1928, es un capítulo de la historia que no se puede obviar y que negarlo es demostrar falta de conocimiento de la historia del país.
Aseguró que el presidente de la época, el conservador Abadía Méndez, le dio un manejo cuestionable a la huelga que terminó en la masacre, y explicó que el pensamiento uribista no busca defender a este político, pero sí tiene sustento precisamente en gente que hizo oposición a su Gobierno como Enrique Olaya Herrera y Jorge Eliécer Gaitán.
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Y advirtió que si bien la literatura del nobel Gabriel García Márquez magnificó el hecho al aumentar el número de muertos, tampoco se puede negar que hubo una masacre y marcó un capítulo sangriento de la historia del siglo XX en Colombia. Por eso, de forma directa, le dijo a la representante Cabal que le faltan argumentos para hablar de este tema.
"Cuando hay intervención pública, porque somos congresistas, quisiera que hubiese una referencia culta y más cuando hablamos de hechos históricos", le dijo Gaviria a SEMANA. Y le recomendó a su colega de partido que "vaya a la historia, porque esto no es un debate ideológico", ya que, a su juicio, "reconocer ese hecho no es denigrar de Colombia".
Claro que María Fernanda Cabal, fiel a su estilo directo de enfrentar las polémicas que se generan en torno a su postura, no evitó dar la discusión, pero advirtió que prefería esperar a darla más de fondo cuando pasara el debate electoral, pues reconoce que el Centro Democrático “está muy polarizado”.
Lo primero que dijo la congresista -al ser consultada por esta revista- es que ella nunca ha negado que la masacre existiera, solo que, contrario a lo que dicen quienes la han confrontado por este tema, quiere saber los verdaderos motivos que condujeron a que se escribiera ese capítulo sangriento de la historia. "Estoy preparada para cualquier debate", precisó.
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La tesis de Cabal es que esa masacre se motivó por hechos que van más allá de la protesta de los trabajadores de las bananeras y el papel que en su momento jugó el Ejército, ya que, según sus argumentos, detrás había una intención por confrontar en armas al Estado y fomentar el levantamiento de la izquierda socialista y tal vez más extrema.
"Si entramos en un debate más serio, sin destrozarnos, podríamos construir mucho más", refutó Cabal, quien agregó que "no les tengo miedo a José Obdulio ni a los historiadores que me escribieron". Además, anunció que les dará el debate siempre y cuando lo aborden "desde fuentes fidedignas y no ideológicas".
Algo que los diferencia, por ejemplo, es que la representante Cabal asegura que detrás de los organizadores de la huelga podría haber infiltradas personas que querían armar grupos ilegales para enfrentar al gobierno del momento, mientras que el senador Gaviria la refuta argumentando que ese tipo de acciones ilegales comenzó a sufrirlas el país años después, especialmente en el marco de la llamada ‘guerra fría‘.
Claro que el tema de las bananeras ha sido tan polémico que hasta un grupo de historiadores de la Universidad de los Andes, alma mater de Cabal, se declararon indignados por las posturas de la representante que, a juicio de los académicos, no tenía otra intención que negar un hecho histórico. Ella, por supuesto, rechazó esa postura.
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Ahora lo que se atiza con este enfrentamiento entre estos dos ‘pesos pesados‘ del uribismo es un debate político y electoral. Y si bien esta es una discusión histórica y Cabal se mostró más cauta que Gaviria a la hora de asumirla, lo cierto es que al confrontar públicamente sus posturas sobre determinados temas, que incluso han dividido a la opinión, les permite generar visibilidad en momentos en que, por decisión de su líder, el expresidente Álvaro Uribe, la lista al Senado del Centro Democrático -en la que ambos están- será abierta y cada cual deberá pujar por sus propios votos. Ya comenzaron las disputas internas.
