El Centro de Pensamiento Primero Colombia reafirma ante la opinión pública que una de sus principales materias de estudio y análisis en su ideario político es la materialización del Derecho Fundamental a la Salud que debemos tener todos los Colombianos.
Si bien son bienvenidas todas las iniciativas legislativas de carácter estatutário u ordinaria que abran nuevos espacios de reflexión, discusión y análisis en esta materia, es preciso no hacer tierra arrasada con los avances y logros que representa para los Colombianos la gestión de riesgos y el tener Un Seguro público de Salud que defendemos y apoyamos en contraposición a algunos sectores que pretenden volver al proscrito Sistema Nacional de Salud fundado en subsidiar una oferta pública de prestadores en condiciones bastante ineficientes y precarias y con unas coberturas y accesos reales que dejaban mucho que desear.
Avances significativos en la Progresividad de los Derechos Sociales y particularmente en el de la salud producto del aseguramiento tales como : Coberturas por encima del 95% de los Colombianos, protección financiera de las familias y disminución del gasto de bolsillo ante un evento de salud, focalización y aseguramiento universal de población pobre vía Sisben, homologación por lo alto e igualdad entre regímenes contributivo y subsidiado en términos de prestaciones, procedimientos, medicamento, dispositivos contenidos en el POS (plan obligatório de Salud ) entre otros, no solamente deben preservarse sino mejorarse.
Celebramos que se puedan registrar avances normativos en una verdadera política de privilegiar la salud por encima de la enfermedad y su estrategia principal de la atención primaria , de contar con una política farmaceútica Nacional y de control de precios que frene los abusos en medicamentos, de fortalecer y rediseñar la inspección, vigilancia y control y el marco normativo para el Talento Humano en Salud, de Evaluar el sistema y de formular cada diez años un Plan Decenal de Salud Pública, así como de fortalecer los Hospitales Públicos y ordenar la conformación de Redes de Prestación de Servicios de Salud.
Lo que no podemos es dejar de advertir algunos peligros y dificultades que a futuro se podrían presentar comprometiendo seriamente al Gobierno Nacional y al Congreso de la República de los resultados que pueda ocasionar, en caso de que aceleradamente sean aprobada ( en su lógica política y en un ambiente pre-electoral que indudablemente no es el mejor para debatir serena y objetivamente esta ley estatutária). De no ser consecuente y acertada en algunos artículos esta Ley Estatutária,, puede generar hechos cumplidos ,retrocesos e inflexibilidades inamovibles hacia el futuro para garantizar el derecho a la salud y a su mecanismo de protección Constitucional la Acción de Tutela para ampararlo en el caso de que sea amenazado o vulnerado. Histórias recientes como la falllida Reforma a la Justicia no merecen ser repetidas
Advertimos de las series dificultades que se podrían presentar el instrumentar una ENTIDAD o FONDO UNICO NACIONAL de recaudo, afiliación y pago de naturaleza pública con un sinnúmero de transacciones y obligaciones, de registros y manejo de los recursos del Sistema, con los altos riesgos tecnológicos y de auditaje que ello implica, con probables y graves falencias en la contratación, en sistemas de información, en la comprobación y verificación de derechos, en los datos y cifras que dan fé del estado de salud de los afiliados y de su seguimiento , del registro de la afiliación y por demás responsable del pago total de los servicios y de licencias de maternidad o paternidad, incapacidades por enfermedad general y demás prestaciones económicas, por no hablar de todas las demás funciones a su cargo y de los problemas de migración y transición que ello conlleva. Adicionalmente como está diseñado este fondo Único tiene implícito una clara intención de seguir concentrando funciones, poder y recursos en el Gobierno Nacional, con una precária gobernanza y representacion ciudadana sin que permita un verdadero Control Social del mismo.
La Experiencia del extinto Instituto de Seguros Sociales bajo esta premisa fué nefasta y apenas contaba en su momento con 3.5 millones de afiliados. La história no se puede repetir, máxime ahora que estaríamos frente a más de 42 millones de Colombianos a cargo de este fondo .
Finalmente llamar la atención sobre el impacto que desde el punto de vista de la sostenibilidad fiscal del sistema , el hecho de pasar de unas coberturas establecidas en el POS como un plan explícito y preciso de salud a un plan de beneficios amplio con exclusiones explicitas que plantea la reforma. Debe haber absoluta claridad en los límites que necesariamente el Estado le plantea a sus ciudadanos en términos de lo que le cubre o nó el sistema dada la finitud de recursos frente a las aspiraciones ilimitadas de servicios y coberturas de los Colombianos. Esta percepción de que el nuevo plan es infinito y que todo prácticamente esta incluído, puede ser muy “ taquillero” inicialmente para el Gobierno y aplaudido por los ciudadanos, pero a la larga será la espada de Damócles, dadas las malas interpretaciones e implicaciones legales y económicas que de ello se va a desprender hacia el futuro.
Ojalá no estemos ás portas de empezar a transitar un peligroso camino y terminar en un salto al vacío en materia de garantizar el Derecho Fundamental a la Salud .
Bogotá, Junio 6 del 2013
CENTRO DE PENSAMIENTO PRIMERO COLOMBIA