La calle ciega de JMS

Durante la apertura de la reciente legislatura electoral, el valiente senador Juan Lozano le cantó la tabla al señor jms Chamberlain Kerensky, con respecto al momento de dolor que vive el bravo pueblo venezolano.

El senador Lozano comentó que: “Atrapado en ese triángulo perverso que han conformado las Farc, el régimen de Nicolás Maduro y el régimen intervencionista de Cuba en nuestro hemisferio, el señor Presidente de la República, Juan Manuel Santos, obra más como un rehén que como un Jefe de Estado”.

Hoy, se conoce nuevamente  de la perversidad y de la crueldad de las Farc quienes asesinan a nuestros policías de manera despiadada. Está suficientemente probado por los venezolanos lo que ha representado la invasión y la llegada y el desembarco de tropas cubanas y conmueve a los demócratas de Colombia, de América y del mundo,  lo que ocurre en la hermana república de Venezuela.

La respuesta del Presidente candidato es el silencio. Es cerrar los ojos. La respuesta de Juan Manuel Santos, quien está obligado a hacer cumplir la Carta Democrática de la OEA, es guardar cómplice y cobarde silencio frente al atropello cotidiano de los derechos de los estudiantes en Venezuela, frente a la reclusión del dirigente Leopoldo López, frente a los medios colombianos como NTN 24 Horas, sin que el presidente de la república, en minúscula, de Colombia abriera su boca para exigir respeto por los nuestros.

El Presidente candidato, atemorizado por lo que ocurre en este país que dejó ver una vez más que no está dispuesto a reelegirlo, prefiere guardar silencio y concentra el esfuerzo de la señora Canciller en protestar por una declaración del vicepresidnete Angelino Garzón.

  Sigan así. Guardando silencio cómplice frente a todo lo que está sucediendo en el hermano país. Y, en el nuestro. Todos los días, ante la indolencia de la sociedad y de jms, nos están asesinando a nuestros policías y soldados. Van más de 400 asesinatos desde que comenzaron los diálogos habaneros y a nadie le importa. Ni siquiera al general Mora le importa.

Sigan así y verán cómo los colombianos pasaremos su cuenta de cobro en la próximas elecciones. Y a todas estas: Germán Vargas quedó en el peor de los escenarios porque jms está pasando el Niágara en bicicleta. Pero tranquilo, Boby, tranquilo que se acabó la anestesia.

Lo que más duele de jms y su entrega al comunismo castro-chavista, es ver a los “amigos” de uno defendiendo una obra que no se puede, ni se debe defender, por donde se le mire.

Jms cayó en esa calle ciega del neocomunismo del siglo XXI. Quedó atrapado en su propia trampa de la paz. Si los colombianos no reaccionamos a tiempo, viviremos nuestro propio infierno.

Puntilla. Me dicen que @RafaelPardoleyó una carta de @JuanManSantosen la inauguración del Festival de Teatro en Bogotá, lo silbaron y de qué manera.

@ragomezmar

*Miembro de la Corporación Pensamiento Siglo XXI

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