LA DROGA O LA PESADILLA ILUSTRADA EN EL PROCESO POLÍTICO

Saber sobre la droga ilustra y ayuda a los profesionales de la saluda prevenir y rehabilitar, gracias a Dios; pero cuando pasamos al problema macro en el que juega la política, ese saber es una pesadilla, pues comprobamos que no siempre querer es poder. Para medio orientarnos y tener una opinión educada, no especializada, que nos permita tener una posición no manipulable, me permito organizar la ‘pesadilla’ mediante algunos escenarios sencillos.

Primer escenario.Cito del N° 29,enero-marzo de 1995, páginas 7-17,de la Revista de La Universidad de Los Andes, Colombia Internacional, el artículo “Los efectos económicos de la industria de drogas ilegales y las agendas de política en Bolivia, Colombia y Perú”, deFrancisco E. Thoumi.

“Mientras se puede argumentar que la industria ilegal ha penetrado muchas industrias legales,no se puede afirmar que ha contribuido a mejorar el comportamiento de la economía colombiana. De hecho, a pesar del buen manejo macroeconómico, la tasa de crecimiento del PIB durante la época poscocaína (a partir de finales de los años setenta) ha sido en promedio un poco mayor al 3%, cifra que no se compara con el promedio del 5.5% anual visible durante los treinta años anteriores. Esta disminución no puede ser explicada por la crisis de la deuda externa, que Colombia evitó, o por una caída en los términos de intercambio, u otros problemas relacionados con el entorno externo.ʼʼ

“La mayoría de los economistas colombianos que han estudiado este fenómeno concluyen que, finalmente, la industria ilegal ha tenido un efecto negativo sobre el comportamiento de la economía colombiana (Urrutia, 1990, Sarmiento, 1990, Thoumi, 1994). En particular, la industria ilegal ha actuado como un catalizador que aceleró un proceso de "deslegitimización" del régimen contribuyendo al estancamiento económico.Este proceso ha producido una disminución muy notable en la confianza para negociar, lo que aumenta los costos de transacción; ha contribuido a aumentos en la violencia e impunidad que han inducido la fuga de capital "limpio" y han aumentado los costos privados de la seguridad; ha promovido expectativas de grandes utilidades rápidas que han resultado en inversiones altamente especulativas y aumentos en el número de quiebras, desfalcos, etcétera.

“La mayoría de los economistas también concurren en que la economía colombiana puede comportarse bastante bien sin la industria de drogas ilegales (Sarmiento, 1990, Thoumi, 1994). Si esta industria desapareciera, el peor escenario sería una recesión relativamente suave de unos dos años, lo que muchos consideran un precio relativamente bajo comparado con los beneficios que a largo plazo pudieran resultar.”

Teniendo en cuenta lo anterior,a partir del 2003 el DANE empezó a calcular el PIB con y sin cultivos ilícitos paradistinguir la efectividad de las políticas de erradicación de los cultivos ilícitos de las de promoción de la producción agrícola lícita, evitando asídistorsiones en las tasas de crecimiento del sector agrícola sin ilícitos.Agregabael DANE que con ese ejercicio no se validabani legitimabala existenciade los cultivos ilícitos, pero que era suobligaciónmedir su impactoporque afectaban los flujos de la economía, y el no incluirlos podrían distorsionar la coherencia de las cuentas nacionales y su calidad. Hay que agregar queesa claridad también la exige el FMI, nos afecta a todos, pero no lo sabemos.

Sabemos que Colombia es el mayor productor de coca, que su dinero alimenta a las bandas criminales, que el fortalecimiento del peso desincentivó exportaciones, que el crimen paga más, etc. La corrupción pasó del manejo en pesos devaluados consignados en el exterior al pago físico en verdes; la fibra moral se convirtió en una reliquia hasta el punto que se le confunde con un extremismo; el capitalismo honesto fue remplazado por el crimen.

En el escenario anterior decíaSalomón Kalmanovitz en su columna ‘La Legalización de la droga’ el 27 de noviembre de 2007 en El Espectador:“Es hora de pensar en alternativas a la guerra contra las drogas. La única forma de disminuir la producción a un nivel manejable es por medio de la legalización del consumo,más el monopolio de la compra y venta de cocaína y heroína por parte del gobierno de Estados Unidos. El consumidor podría adquirir la droga con receta médica y, si es adicto, someterse a un tratamiento.Jugando con los precios, se puede eliminar la renta maldita.

Un gobierno demócrata en Estados Unidos estará abierto a cambios de política a favor de tratar el consumo de drogas como un problema de salud público y no criminal, aunque ningún político se atreve allá a sugerir la legalización. Pero desde acá abajo, donde nos ha hecho sufrir tanto,deben surgir las voces racionales que convenzan a la opinión mundial de que hay que cambiar de rumbo.”

En ‘coincidencia’ con Kalmanovitz, Samper, en su libro “Drogas – Prohibición o Legalización” y otros vicepresidentes latinoamericanos que actúan como cajas de resonancia de George Soros, el líder mundial de la legalización, sobre El decimoséptimo ciclo de negociaciones con las Farc, Coca, cocaína y capitalismo, publicó El Espectador el 30 de noviembre de 2013, partes de un comunicado de Las Farc que  decía: “En atención a lo anterior, el narcotráfico debe considerarse esencialmente como una empresa capitalista transnacional de carácter criminal,” y pregunto yo: ¿No les cuestiona a las Farc su propia ética ‘revolucionaria’ que sean ellos los ‘cobradores de impuestos,’ o los dueños del cartel como se les conoce, de esa trasnacional criminal? Y si la visita de Richard Grasso, Presidente de la Bolsa de Valores de Nueva York,a Raúl Reyes significaba negocios con Wall Street, no son ellos socios de esa empresa criminal?

Por otra parte elNational Institute on Drug Abusereportaba en el 2007 que el costo anual para la sociedad, en miles de millones de dólares anuales era: 181 para drogas ilícitas, 185 para el alcohol y 193 para el cigarrillo, para un total de 559 representadosen el cuidado dela salud,pérdida de productividad, la delincuencia, el encarcelamiento y lalucha contra las drogas.

Resumen y análisis del primer escenario. En 1995 diferentes eminencias dictaminaron lo que es de común conocimiento: el impacto negativo del narcotráfico en la economía colombiana, que afecta al 97% de la población en contraposición con el ‘sueño’ del dinero fácil que es el sueño de una inmensa minoría. Como ciertas minorías son noticia más segura en el oligopolio del escándalo, se percibe entonces su ‘vigencia o moda’ como verdad deseable para la mentalidad de masas. Dicen tambiénesas eminencias que Colombia podría subsistir sin la droga, pagando un costo económico menor. Pero lo que no se ha calculado es el costo social del impacto negativo del narcotráfico que sigue creciendo, como sí se ha hecho en Estados Unidos. Legalizar elimina el costo policivo y de cárceles, pero nos olvidamos que las adictivaslegales tienen un altocosto, cuyo comportamiento comparativo se puede utilizar para comprender lo que ocurriría con la cocaína legal. La experiencia histórica comprobable está en China, Holanda, Alemania,Portugal que no tienen guerrilla.Si en los 90 Colombia era inviable en razón de la droga, en el 2010 era reconocida por su confianza inversionista, SIN HABER ELIMINADO TOTALMENTE el factor de producción y solo con haber DEMOSTRADO QUE SE TENÍA VOLUNTAD POLÍTICA PARA HACERLO.

El segundo escenario en 1995.En el número del 10 de noviembre de 1995 de la revista EIR Informe Ejecutivo (Executive Intelligence Review Caso de estudio: Colombia El separatismo en Urabá: un proyecto piloto de las Naciones Unidas), se nos dio a conocer lo que sigue y que seguramente es recordado.

La trama.Las FARC y el ELN, que en conjunto constituyen la Coordinadora Guerrillera Nacional Simón Bolívar (CGNSB), proponen que las Naciones Unidas reconozcanlos departamentos de Santander, Norte de Santander, Cesar, Arauca, Casanare, Meta y Guaviare, así como la región circundante del Golfo de Urabá como territorios bajo control oficial de esos grupos ilegales una medida que daría lugar a una especie de división al estilo de Corea. El planterrorista es controlar totalmente esos territorios parasitiara la capitalBogotá. Un gran porcentaje del agua, los alimentos y los suministros de energía que van a 8 millones de habitantes en Bogotá, provienen precisamente de los territorios que los narcoterroristas quieren controlar. El asedio se combinaría con ataques contra la policía y las instalaciones militares.

La espiral de violencia ascendente en Urabá ha preparado el argumento para este escenario. Urabá se extiende a lo largo de la costa Caribe, desde la frontera colombiana con Panamá, a través de los departamentos del Chocó y Antioquia, hasta los límites con el departamento de Córdoba. Los esfuerzos de las FARC para controlar esta importante región se han concentrado en asesinar a cualquiera que se interponga en su camino. Entre los que se atraviesan "en el camino" están losmiembros del partidoEsperanza, Paz y Libertad (EPL), un grupo ex guerrillero que fue legalizado después de firmar un acuerdo de paz con el gobierno, y que se unió a la alianza electoral del M -19, otro grupo terrorista legalizado.Las FARC consideran alEPL como traidor al firmar un pacto de paz,y ha comenzado a asesinar a sus miembros. El EPL a su vez se armó, e incluso se alió con otros grupos "paramilitares", con el fin de responder con "ojo por ojo y diente por diente" a cualquier ataque de las FARC.El resultado es que 700 personas han sido asesinadas en Urabá este año.

En este momento, la Comisión de Derechos Humanos de la ONU propone que se nombre un relator especial para liderar una comisión de "observadores internacionales" que examinará las masacres de Urabá.Se incluyen en esta comisión delegados de Pax Christi, una ONGafiliada a las Naciones Unidasy conocida por su constante persecución a los militarescolombianos, junto con otras ONG europeas. Pax Christi ya cuenta con más de 100 observadores en Urabá,Francia, Italia y Españaquienes han enviado delegados a Urabá para determinar el costo de esa comisión internacional de supervisión, que sería financiado por la ONU y la Comisión Económica Europea.

Los defensores de esta comisión de vigilancia lo ven como el primer paso para llevar cascos azules de la ONU a la zona para "pacificar" la región, supuestamente porque el Estado colombiano es incapaz de hacerlo. Una vez que la región estuviere "pacificada" bajo la autoridad de la ONU, Urabá sería devuelto a las autoridades colombianas.Sin embargo, si otra masacre ocurriera, se declararía laindependenciade Urabá, de manera que la población de la región podría controlar su propio destino "bajo la protección de la ONU."

En enero de 2014 registramos el mismo escenario soñado de las Farc cuando, desde perspectivas coincidentes leemos en relación con las Zonas de Reserva Campesina:“Solo veinticuatro horas después de la sorprendente e inesperada entrevista en La Habana de la Comisión de Paz de la Cámara, encabezada por el presidente del Senado R. Barreras, con el equipo negociador de las FARC, éste hizo público un comunicado planteando la creación de 59 ZRC, con una superficie total aproximada de 9 millones de hectáreas, y una amplia autonomía que detallaremos más adelante. Preocupante situación en que las FARC utilizan hábilmente la guerra sicológica y muestran claramente su estrategia de fragmentación territorial del Estado para obtener casi gratuitamente un espacio de muy amplia autonomía en el que podrían disponer de sus recursos sin control alguno; a pesar de lo cual, el presidente Santos sigue apostando por el éxito de las negociaciones y la firma de un acuerdo de paz antes de fin de año.”Las FARC intensifican su presión en la Mesa de La Habana con su propuesta de nuevas Zonas de Reserva Campesina(Manuel González Peña,Coronel de Infantería,Agregado de Defensa en Colombia y Ecuador (1994-98)

Por otro lado, en su columna de El Tiempo, “Una propuesta indecente,” Fernando Londoño Hoyos nos advierte el 21 de enero de 2014: “No se necesita especialidad en el tema para saber que están llenas de coca las fronteras con los países vecinos y con nuestros mares tutelares. Los bandidos, que reciben por su tráfico una suma indecisa de entre seis y dieciséis mil millones de dólares por año, tuvieron la habilidad de plantar la coca en los caminos de la cocaína. Que son esos, claro está.

Lo dicho significa que la guerrilla pro santista, como ella misma se declara, no solamente nos pide miles de kilómetros cuadrados para su dominio, sino que en adelante le dejemos el cuidado de la soberanía nacional. Y no se sonrojaron estos bandidos al decirlo, lo que es explicable porque no hay nada que sonrojarlos pueda. Pero el silencio casi unánime que su estúpida pretensión produjo nos aconseja tomar la cosa en serio, porque vamos para allá.

El abandono de las zonas cocaleras, combinado con las famosas “zonas de reserva campesina”, completa el cuadro. Santos, con tal de decir que firmó cualquier cosa con las Farc nos va a entregar. Pero lo peor es que nos lo merecemos. Una opinión que no protesta, que no se indigna, que no se subleva, bien merecido tiene su destino.”

Análisis del segundo escenario.En 1995 Colombia estaba sitiada por un complot para poner parte desu territorio bajo las Farc. Desdeel 2001, después de una lucha prolongada y efectiva, esa situación serevirtió. En el 2014, por decisiones políticas antipatrióticas, podemos retroceder a 1995 o algo peor como lo anuncian las Farc. Veamos.

De la mencionada noticia de El Espectador, citamos: “Para las Farc el narcotráfico está inscrito en las reglas del modelo económico que predomina en el mundo, en el que la producción, circulación, distribución y consumo de drogas se ve estimulado por la ley de la oferta y la demanda, atizada por el alto consumo en países eminentemente capitalistas como lo son los europeos y Estados Unidos.” Este es el primer paso que justificaría la existencia de las Farc como multinacional si la droga fuera legalizada, con fuerza productiva en las ZRC, pues: “Los cultivos de coca no son más que otra de las modalidades de la producción agrícola, con raíces ancestrales y culturales indiscutibles.” Es decir, Colombia se inscribiría oficialmente como un estado productor de narcóticos, siguiendo el modelo uruguayo, y las ventajas que permiten la ambigüedad de la legislación colombiana, pero con cesión deterritorio a una organización comunista. Se cumple, de manera irónica, el escenario que pedía Kalmanovitz en 2007 “…desde acá abajo, donde nos ha hecho sufrir tanto,deben surgir las voces racionales que convenzan a la opinión mundial de que hay que cambiar de rumbo.” Este es el escenario que también le conviene a George Soros, líder mundial de la legalización,financista de HRW cuyo representante, Vivanco, se opone al fuero militar de nuestro ejército.

Conclusión con libreto incluido. Del libro “El laberinto colombiano” que fue el título escogido por la Rand Corporation para su manual de influencia política en relación con el conflicto colombiano,publicado por Universidad Externado de Colombia en el 2001, copio del capítulo “Futuros para Colombia” el escenario que escogió Santos, adaptando algunos conceptos.

De acuerdo con los escenarios de los especialistas en 1995 estábamos en el escenario de la ‘desintegración’, que Uribe cambió. En el 2014 las Farc y Santos ‘venden’ el escenario ‘Acuerdo de Paz Exitoso’ para los incautos colombianos, pero que en realidaddescribe el acuerdo salvadoreño. Sin embargo,el que en realidad se trata de implementar es el que sigue. “Las Farc se toman el poder o hacen parte de un gobierno de transición,”que describe esta pesadilla: El deterioro continúallevando a una toma del poder por parte de las Farc, (a partir del 2001 se rompió esa tendencia), o a un acuerdo de paz fuertemente inclinado a favor de las Farc. Una primera variación de este escenario podría ser el establecimiento por las Farc de un régimen en línea con las características del régimen cubano, que incluiría un sistema político central autoritario, la disolución de las fuerzas armadas y las estructuras políticas del viejo régimen, la nacionalización de amplios sectores de la economía,controles a la actividad económica, una política exterior “antiimperialista”, y el éxodo de una gran porción de la clase media. Una segunda variación podría involucrarun arreglo de paz fuertemente a favor de las Farc.(Participación política como trampolín para el poder compartido desde el Congreso). Contemplaría un gobierno de coalición aceptable (en 1998 Santos hablaba de Frente Nacional con la guerrilla) para las Farc, un arreglo de ‘poder compartido’ que dejaría a las Farc a cargo de amplias zonas de Colombia (ZRC), entre ellas las regiones donde se cultiva coca y la eliminación de la influencia de Estados Unidos. ¿Les parece familiar el escenario? Si las Farc han leído el libro y no sé si Santos lo haya hecho ¿Cuál ha sido la estrategia de las Farc en La Habana? Cañar con la primera parte de este escenario, para obtener el de la segunda parte del escenario que las llevaría a su objetivo real. Para distraer a la opinión pública y a los negociadores de La Habana ¿Cuál es el libreto que despliegan las Farc por fuera de la mesa? No lo digo yo, lo expuso Anncol el 23 deAbril de 2013en su editorialSobre los llamados “escenarios” futuros para Colombia.(Prueba de que han leído el libro). Estos son los escenarios ideadoscomo cortinas de humo,cajas de resonancia, odirectrices antiuribistas.

1.Un Golpe de militares descontentos con el actual gobierno, azuzado por el expresidente Uribe Vélez, Francisco Santos, Fedegán, el Opus Dei, y los demás enemigos abiertos y agazapados que tiene el proceso de paz de La Habana.

2.La reelección de JM Santos, en una tragicomedia electoral cantada donde se enfrentarán, el presidente actual, las fuerzas del Uribismo coaligadas, lo que queda de los Verdes, y la ex alcaldesa de Bogotá Clara López, a nombre del Polo Democrático y otras fuerzas de Izquierda.

3.Una modificación a esta “performance” puede ser que ante el rechazo popular marcado que viene sufriendo la llamada reelección de JM Santos, y si los acuerdos de la Habana avanzan sustancialmente, el Presidente, aconsejado por Cesar Gaviria, en una jugada de esas a las que tiene acostumbrado a sus seguidores, saque el “gallo tapado” de Humberto de la Calle, para que continúe en la presidencia el proceso avanzado con el que se espera la terminación definitiva del conflicto interno colombiano.

4.También puede darse que, la Movilización Popular por la Paz con Justicia social, Democracia y Soberanía, que tuvo una expresión insospechada el 9 de abril pasado, continúe su accionar consiente construyendo “Constituyentes por la Paz” en los municipios y regiones de Colombia, y con una presión de masas cada vez más creciente y consciente, es decir, politizada, haga confluir todo el proceso de la Solución Política al conflicto interno colombiano, en una nueva situación Constituyente, que abra camino a una nueva Colombia en Paz con Justicia social, Democracia y Soberanía. A ese escenario de lucha de masas por la Salida Política, la Constituyente popular y la Paz con Justicia social, Democracia y Soberanía, ANNCOL le apuesta sus restos. (Nótese que los de Anncol, como Santos, apuestan.)

En La Habana apuestan con realidades, cortinas de humo, promesas, acuerdos, comodines (Uribe es uno, el Procurador es otro; Petro, ni se diga, en el párrafo 1 están los otros) en relación con una dimensión de ‘intereses.’ Nuestra desventaja es que pensamos desde la ética, la legalidad, las esperanzas, justicia, las buenas costumbres, el bien común, los negocios lícitos. En el ‘mundo de los intereses’ el titiritero real maneja a buenos y malos, de izquierda o derecha, para los fines que sólo él conoce.De La Habana han sido excluidos los hombres pensantes de Colombia dizque para que no se entorpezca el proceso. Más bien recuerdo a Thomas Carlyle que decía: “Un hombre pensante es el peor enemigo que puede tener el Príncipe de las Tinieblas,” el titiritero, que a veces se encarna en algunos políticos sin conciencia.

Share on facebook
Facebook
Share on google
Google+
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
LinkedIn

Buscar

Facebook

Ingresar