“El poder oscuro y criminal del narcotráfico es el más grave de los problemas de la sociedad colombiana”. Luis Carlos Galán Sarmiento

“Y parte de la discusión que los expertos y los científicos deben dar es si la descriminalización o la regulación del consumo de drogas van a tener efectos positivos, negativos o neutros. Todavía esa respuesta no es clara.” Juan Manuel Santos

(Discurso de homenaje a la memoria de Luis Carlos Galán)

No sé si sentarme a llorar en la Plaza de Bolívar enarbolando un cartelón solitario dirigido al Senador Juan Manuel Galán que leería: “Investigue Senador, investigue. Perdóneme la impertinencia.”

Al finalizar su entrevista con María Isabel Rueda (El Tiempo, Enero 5/15) dice: “Estamos derrotando el narcotráfico por otro camino, que es empezar a destruirles el negocio.” Y leo en el Informe Mundial sobre Drogas de las Naciones Unidas 2013 múltiples aspectos ignorados por el honorable senador; entre ellos el inmenso valor del mercado de drogas ilícitas cuyos agentes permean todos los estamentos sociales con influencia, intimidación y dinero suficiente para mantener la consigna de “Plata o plomo.”

Si a un profesional informado del gobierno, la academia, la iglesia o las Fuerzas Armadas se le pregunta sobre las drogas, su respuesta va a ser la misma: es un problema preocupante que impacta a la sociedad, pero desconocerá la estructura del negocio, el lavado de activos, el sistema financiero que lo realiza, la globalización del negocio con la criminalidad asociada, los diferentes tipos de drogas, su procesamiento, el mundo de los cultivadores y consumidores, fabricantes, distribuidores, las características de la enfermedad de la adicción, etc. Es cosa de especialistas; es un mundo del que no quiere saber nada porque no le afecta directamente, aparentemente, hasta cuando el hijo, el amigo, el familiar se ven involucrados.

Un padre de familia con educación universitaria que se preocupa por la salud de su familia sabe del Vademécum Médico, de la cultura de la salud, las estructuras asistenciales, etc. Pero cuando se trata de la salud mental de sus seres queridos que se puede ver afectada por las drogas, solo ha oído hablar de la criminalidad, la financiación del terrorismo, la legalización, por lo que el tema es tabú, careciendo de criterio ante cualquier propuesta o comentario que pretenda ‘solucionar el problema.’

Por eso es increíble oírle decir a un senador de la república que va a acabar con el negocio de la cocaína, las anfetaminas, las diferentes drogas de diseño, y toda la estructura del negocio, mediante la legalización de la marihuana como droga medicinal. Uno de los problemas que reconocen los europeos es la absoluta ignorancia sobre el negocio que impide obtener la cooperación que buscan de la sociedad internacional, a nivel de individuos, instituciones educativas y organismos diferentes a los policivos.

Duele oírle decir al senador Galán que a su papá lo mató el prohibicionismo; vale decir, la estructura que lucha contra el crimen; no, lo mató Pablo Escobar como instrumento de las ambiciones políticas de Alberto Santofimio. Quizá el senador Galán necesite leer la noticia aparecida en The Guardian el 13 de diciembre de 2009 “El dinero de las drogas salvó a los bancos de la crisis global dice consejero de la Naciones Unidas” (Drug money saved banks in global crisis, claims UN advisor.)

Antonio María Costa, director de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito, dijo que ha visto evidencia de que el producido de la delincuencia organizada era "el único capital de inversión líquido" a disposición de algunos bancos al borde del colapso el año pasado. Dijo que la mayoría de los $352bn (216bn de libras) de ganancias por drogas fue absorbido por el sistema económico en sus resultados de utilidades.

Esto hace surgir preguntas sobre la influencia de la delincuencia en el sistema económico en tiempos de crisis. También plantearía un examen más detenido del sector bancario y de líderes mundiales, entre ellos Barack Obama y Gordon Brown, que plantearían nuevas regulaciones del Fondo Monetario Internacional. Hablando desde su oficina en Viena, Costa dijo que la evidencia de que el dinero ilegal estaba siendo absorbido por el sistema financiero le fue suministrada por las agencias de inteligencia y los fiscales hace alrededor de 18 meses. "En muchos casos, el dinero de las drogas fue el único capital de inversión líquido. En el segundo semestre de 2008, la liquidez era el principal problema del sistema bancario y, por lo tanto, el capital líquido se convirtió en un factor importante", dijo.

En nuestro medio el “Abrazo Grasso,” durante las conversaciones de El Caguán, testimonia el entendimiento de Richard Grasso, presidente de la Bolsa de Valores de Nueva York en ese entonces, y Raúl Reyes en el sentido de que Grasso invitó a Reyes a invertir en Wall Street.

Y de tiempos más recientes le pediríamos al senador Galán que leyera en The Guardian el artículo de Ángela Monghan del 29 de mayo de 2014: “Las drogas y la prostitución se incluirán en las cuentas nacionales del Reino Unido” pues la contribución de los traficantes de drogas y prostitutas a la economía del Reino Unido aumentó cifras por £ 10 mil millones según cálculos muy serios. Es decir, a la mafia se le está tendiendo tapete rojo para que debute en la sociedad legal.

Y si queremos entender cuál es el poder de las Farc mediante el cual pretenden no pagar cárcel por sus crímenes, no es sino que le echemos un vistazo al siguiente escenario: “Los narcotraficantes de los banqueros y el lavado de dinero a escala mundial mediante las drogas y el terrorismo, pero demasiado importantes para ir a la cárcel” (Gangster Bankers: World-scale money laundering for drugs and terrorism but too big to jail) por Matt Taibbi en La revista Rolling Stone del 14 de febrero de 2014.

Entonces ¿Cómo pretende el Senador Galán acabar con una estructura mundial del crimen organizado sin la cooperación de organismos policivos internacionales y con pruebas judiciales irrefutables contra cierta élite mundial? También valdría la pena que el senador le diera una leída a las diferentes leyes con sus múltiples condiciones de protección para la población no enferma que deben seguir médicos y usuarios de la marihuana medicinal. Y cómo los traficantes de drogas utilizan esas leyes para beneficio propio falsificando los controles del caso, pues la mente criminal le tuerce el cuello a las mejores intenciones.