El aumento de los precios de medicinas y alimentos en la frontera, no lo corregirán los mismos culpables del fracaso de la seguridad de las personas, de la falta de electricidad, del mal manejo de las finanzas, de la destrucción del comercio y la industria, de la falta de producción y manejo desordenado de las aduanas y del contrabando por caminos verdes, porque ellos son los principales responsables del fracaso alimentario en toda la región.

En todos los municipios del Estado Táchira y del Norte de Santander, denuncian complicaciones de niños y ancianos por desnutrición y falta de medicinas, aquí todos sabemos que los encargados del resguardo de fronteras de uno y otro lado, permiten que se lleven comida y medicamentos de una población a otra, pero el hambre crece cada día más del lado Venezolano por la falta de producción, lo que obliga a la implementación de una medida humanitaria urgente, cuestión que estos no permiten porque es su negocio.

Desde estas tierras que unen a dos grandes naciones, les recordamos que las muertes por hambre y falta de medicamentos de niños y ancianos, son crímenes de lesa humanidad y estos no prescriben, no tienen fecha de vencimiento, por lo tanto Maduro y Santos algún día serán juzgados por no atender a tiempo a tantos seres inocentes victimas de su mal comportamiento e indiferencia.

De manera irresponsable ellos cerraron la frontera, fuente de trabajo y desarrollo para las dos naciones hermanas, ahora se desentienden de los graves problemas que aquejan a tanta población, víctimas de una grave crisis ocasionada por gobernantes desconsiderados, que mantienen a estos habitantes con altos niveles de desempleo y hambre, por culpa de quienes nunca debieron gobernarnos, ya que su fracaso es estrepitoso y han llevado a la ruina a toda una población pujante y trabajadora, que los desprecia y rechaza por indolentes.