Una más

Santos complace otra vez a las Farc. De nuevo, a cambio de nada:

  1. Lavado de imagen: de estar en las listas internacionales de grupos terroristas a ser una “parte” que negocia de igual a igual con el Estado;
  2. de ser perseguidos por el Estado, a que los proteja, los traslade a Cuba y les permita planear y coordinar sus actividades delincuenciales de manera conjunta y sin riesgo alguno. De paso, que articulen la alianza con el Eln y con las organizaciones criminales internacionales que los visitan en La Habana;
  3. antes freno a los bombardeos, el arma más eficaz, y ahora freno de todas las operaciones ofensivas contra esa guerrilla;
  4. suspensión de fumigaciones de narcocultivos con glifosato;
  5. no extradición, con promesa de regla constitucional para no hacerlas en el futuro;
  6. tratamiento del narcotráfico como delito conexo a los delitos políticos, en abierta contravía de la Convención de Viena contra el Narcotráfico y de la jurisprudencia nacional;
  7. conexidad al delito político de todas las conductas criminales, con excepción de los crímenes internacionales: de guerra y de lesa humanidad;
  8. promesa de indulto y amnistía de todos los delitos, menos los crímenes internacionales;
  9. y para esos crímenes, penas alternativas y sin privación de la libertad;
  10. designación por las Farc de quienes los van a juzgar: escogerán a los miembros del “tribunal especial de paz”. Los victimarios seleccionarán a sus jueces;
  11. peor, Santos les da autoridad a las Farc para que juzguen, por vía de ese tribunal, a los miembros de la Fuerza Pública;
  12. entrega de los fueros constitucionales de presidentes y demás autoridades: el tribunal y los jueces de las Farc tendrán facultades para juzgar a todos aquellos “que participen o hayan participado directa o indirectamente en el conflicto”, sin excepciones;
  13. disolución de responsabilidades de las Farc por vía de la extensión de “culpas” a toda la sociedad: las Farc son víctimas, no victimarias;
  14. modificación de la “historia” del conflicto a través de la designación por las Farc de los miembros de la “Comisión de la Verdad”;
  15. circunscripciones especiales en las zonas de conflicto, donde no podrán participar los partidos y movimientos políticos ya existentes, es decir, donde solo podrán hacerlo las Farc y sus organizaciones;
  16. eliminación de la restricción constitucional que impide a un condenado por delitos comunes ser elegido a cargos de elección popular. Todos los criminales de las Farc podrán hacer política sin ningún límite;
  17. además de lo anterior, ahora nos anuncian curules directas y por varios períodos para las Farc en el Congreso, asambleas departamentales y concejos, sin que haya votación popular, en abierta alteración de la democracia;
  18. cambio de las reglas de juego para que el plebiscito sea un referendo y “la paz” y los desafueros de Santos y las Farc los aprueben menos de 4.400.000 colombianos. Ni siquiera se atrevieron con los 7.800.000 que votaron a Santos en el 2014;
  19. manoseo de la Constitución y de las instituciones, creando nefastos y peligrosísimos precedentes para cuando llegue al poder un gobierno populista: emascularon al Congreso y subvirtieron la democracia para que las minorías tengan poder de veto; crearon con el tribunal de paz una jurisdicción paralela al sistema nacional de administración de justicia, rompieron el equilibrio de poderes para dar al Presidente facultades propias de una dictadura, molieron los mecanismos de participación popular para hacer del plebiscito un referendo y darle poder decisorio a las minorías;
  20. ahora, como no bastaba, indulto para guerrilleros sin firma del proceso de paz, sin verdad y sin reparación. Y en secreto, sin que nos cuenten quiénes son los beneficiados, para que sea imposible saber si entre ellos hay comandantes o responsables de crímenes atroces.

La lista, para que no se haga interminable, no ha incluido las concesiones y favores de los tres acuerdos ya firmados con las Farc. Santos no ha parado de bajarse los pantalones y no ganó una. Y lo que nos falta.

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