Venezuela libra una gran batalla

En las calles de Venezuela y en medio de la peor crisis de su historia, el pueblo unido lucha por recuperar la democracia que robó un grupo de asaltantes enquistados en el poder: Maduro, Cabello, Tarek, Aristóbulo y Padrino, son los rostros visibles de este desastre, como de la pérdida de vidas por falta de alimentos y medicinas, de la violencia desbordada que acaba con el futuro de la Nación en manos del hampa, y de las violaciones permanentes a los derechos humanos y a la Constitución y las Leyes de la República.

Se está Librando una batalla en las calles contra un sistema autoritario, especialista en represión y violencia, carente de todo talante democrático, que justifica su agresividad por que le garantiza su permanencia en el poder, son expertos en confundir y envenenar la conciencia ciudadana, desvían la realidad  sustituyéndola por mentiras podridas, que a diario difunden a través del aparato publicitario, conformado por la mayor parte de medios de comunicación: radio, tv, prensa y redes.

Marchamos por las calles, porque no tenemos ningún derecho garantizado, el año pasado asesinaron a 29.000 Venezolanos, 95% de hospitales solo tienen 5% de insumos, el 80% de los ciudadanos comen solo una vez al día, los niños se acuestan a dormir con hambre, por falta de dinero y de trabajo 18% de la población come de la basura, los jóvenes profesionales en su mayoría se han ido del País en busca de nuevos rumbos, el 33% de la población estudiantil no terminó el año escolar, ocupamos el primer lugar de corrupción en la región y el salario mínimo solo alcanza para adquirir el 5% de los alimentos de la canasta básica, y por si fuera poco somos el segundo país más violento del planeta.

Ahora pretenden embarcarnos en una Constituyente sectorizada, amañada y fraudulenta, violatoria de nuestra carta magna. Con el solo propósito de eliminar la Asamblea Nacional, no convocar a procesos electorales ya vencidos, imponer el comunismo obedeciendo instrucciones del Foro de Sao Paulo ( Internacional narco-comunista de América), para mantenerse en el poder por la fuerza, pero cada mala acción del régimen, tendrá una reacción del pueblo, y ningún Venezolano puede esperar a que le digan qué debe hacer, el camino es la calle, el cambio si es posible, defenderemos nuestros derechos con las armas que tenemos los demócratas: la protesta popular y el voto, la lucha está planteada, seremos decentes en el combate y libraremos una gran batalla, donde con la ayuda de Dios obtendremos el triunfo por la democracia y la libertad de Venezuela.

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