León Valencia tiene sed

Liberté, egalité, fraternité, fueron las palabras que surgieron de las tripas de los franceses quienes hartos de la arrogancia de su déspota rey Luis XIV, decidieron en un día de furia pasarle la guillotina. Lo que  yo no sabía es que la cuarta palabra que surgió de esa revolución, el problema de las revoluciones es que usted sabe cuándo comienzan pero no cómo  terminan, fue: Mort. ¡Muerte!. Libertad, igualdad, fraternidad y muerte.

Anatole France, fue uno de esos escritores que surgieron a finales del siglo XIX y comienzos del nuevo milenio, siglo XX. France cometió un error. Le dio por denunciar en: Les dieux ont soif, Los dioses tienen sed, a través del citoyen: Gamelin,  todos los abusos de autoridad que se produjeron durante la famosa revolución.

Su obra crítica a la revolución le produjo serios inconvenientes con sus compañeros de lucha dentro del socialismo francés de la época, terminando decepcionado por sus creencias. France  puede estar tranquilo. No fue el único decepcionado por el socialismo. El poeta Neruda y el comunista peruano Ravines, también. Y, Plinio.

Una vez degollado el Rey, quienes llegaron al poder: Danton, Morras, en menor medida Robespierre y uno muy famoso: Guillotine, hicieron de las suyas Todo aquel que se opusiera a las medidas tomadas por el Comité revolutionaire, pasaría por la guillotina.

La anterior introducción, un poco extensa, para comentar en la presente columna de opinión, que no es más que eso, que el hoy “analista” Valencia pretende ser la guillotina mediática a través de su espacio de “opinión” cedido muy generosamente por la revista Semana.

Valencia tiene tanta sed que en un programa radial: Voces RCN conducido por J.C Iragorri, enjuició a toda la familia Gómez, según sus propias palabras: “de ser la principal causa de lo que se conoce como el período de la Violencia”. Sostiene que “Álvaro Gómez Hurtado y toda su familia debería asumir el costo político por las muertes producidas durante ese período”.

En el presente, no tengo nada a nivel personal contra el “analista”. Ni lo conozco. Como diría la rana de Facebook: A veces me dan ganas de conocerlo, pero se me quitan, rápidamente. En sus anteriores “columnas” también la emprendió contra el grupo económico Ardila Lulle,las periodistas Claudia Gurisatti y Maria Isabel Rueda.

Al paso que vamos, no solamente el vil asesinato de AGH quedará en la impunidad total gracias a la vista alegre del fiscal Motealegre sino que, además de ser secuestrado por el M19,  AGH tendría que responder desde el más allá por el período conocido como la Violencia por cuenta del odio visceral del señor Valencia y su Comisión de la Verdad. Tengan cuidado. León Valencia tiene sed.

Puntilla. No suelo comentar sobre asuntos familiares, no es el objetivo de esta columna de opinión generosamente cedida por el Nuevo Siglo. Es una columna de opinión, del último conservador que queda.

Share on facebook
Facebook
Share on google
Google+
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
LinkedIn

Buscar

Facebook

Ingresar