YO TENGO UN SUEÑO

“Yo tengo un sueño que mis cuatro hijos pequeños vivirán un día en una nación donde no serán juzgados por el color de su piel sino por el contenido de su carácter.” MARTIN LUTHER KING

En la ciudad de Ibagué, el Presidente Uribe propuso un tema de reflexión de enorme profundidad: la construcción de un partido que sea un legado para las generaciones futuras.

Para ello utilizó como parámetro el tiempo propio de los estadistas y visionarios, que es la antípoda del de los corto placistas: un siglo. Esta mirada, que no es la de un simple jefe  de campaña, señala no sólo la ruta de la década futura, sino identifica las bases para un proyecto del siglo XXI.

Uribe sabe que el país necesita pasar el trago amargo de la violencia. Que en un siglo, esta página amarga se recordará como un episodio triste pero superado. La incógnita es ¿qué le ofrecerá a las cuatro o cinco próximas generaciones el proyecto del Centro Democrático?

Al escuchar al Presidente, las fibras mas profundas de mi alma afloraron y sentí que  mi sueño y  el de muchos de mi generación se podía realizar. Es que quien hablaba era la única persona capaz de hacerlo; de construir un partido para el futuro, que rompa todos los esquemas tradicionales que han llevado a los partidos a aislarse de los ciudadanos y a los violentos a aprovechar esa debilidad de la democracia.

Para una nación democrática, y parodiando a Martín Luther King, preguntaría:

¿Será que en esa nación del futuro los hombres serán juzgados por el contenido de sus faltriqueras , o por el contenido de su carácter?

¿La política será un ejercicio respetable que apoye la libre empresa, pero que el político no utilice su posición para ser parte del negocio?

¿Será que los elegidos en cargos de representación popular no se sientan dueños del Partido que los eligió ni dueños de su curul eternamente?

¿Que los líderes florezcan, no por sus habilidades en el lobby, sino por su habilidad en representar a los ciudadanos y defenderlos con valor y sabiduría?

¿El político será valioso no porque cree “tener” votos como una propiedad privada, sino que todos los días los conquista con amor por la Patria y compromiso con el pueblo?

¿Seguiremos viendo a políticos preocupados por controlar entidades del Estado para poder hacer “campaña”?

¿Seguiremos viendo a políticos empujando el nombre de alguno de sus seguidores a un cargo en el Partido o el Estado, no por su capacidad de defender al país sino de defenderlo a él?

Muchas preguntas como estas me vinieron a la cabeza. Usted amable lector siga haciendo la lista, pues ahora que estamos empeñados en la construcción de este nuevo partido, tenemos que tener claro qué queremos de él, pues estas elecciones las ganaremos con el indiscutible liderazgo de Uribe, pero si lo que construimos como partido sigue con las viejas mañas de la politiqurería, el país del futuro no nos lo perdonará.

Yo tengo un sueño, que es el mismo de toda la nación y al que Uribe ha revivido. ¡Mantengámonos vigilantes!

Director Ejecutivo Centro de Pensamiento Primero Colombia

Share on facebook
Facebook
Share on google
Google+
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
LinkedIn

Buscar

Facebook

Ingresar