Hace rato, recuerdo leí una anécdota que decía que mientras Diógenes tomaba el sol, se le acercó Alejandro Magno; y le dijo: "pídeme lo que quieras y te será concedido", a lo que el gran filósofo, después de meditar un poco acerca del ofrecimiento, respondió: "hazte a un lado, que me estas tapando el sol". Palabra mas, palabra menos, fue lo acontecido a las farc y deshonestos en el Caquetá, cuando los caqueteños y especialmente los florencianos y sanvicentunos, fueron protagonistas de de esta gran hazaña derrotando a las farc en su casa, superándolos con humildad en las urnas el 25 de octubre, poniendo en alto el peso de las virtudes morales y humanas, expresándoles con el voto, rebeldía para volver a disfrutar el sol.
Esta decisión está destinada a fraguar el sendero de las aspiraciones de vida, de libertad, de justicia de felicidad y la paz tan anhelada.
Pero esta determinación del pueblo, después de tantos oprobios, debemos calificarla como merecedora al respaldar las candidaturas y elegir a los ingenieros Andrés Mauricio Perdomo y Humberto Sánchez como alcaldes de Florencia y San Vicente del Caguán respectivamente; no son producto del arte de la magia, el pueblo ha entendido muy bien y sigue agradecido con Álvaro Uribe Vélez que en su gobierno le dio la vuelta al Caquetá en hechos a través de la inteligencia y la razón; instrumentos en la construcción de caminos del saber en pro de nuevas formas de vida, siendo su objetivo la búsqueda definitiva y sustentable del bienestar social y la paz.
En la magnífica obra "El hombre que amaba los perros" afirma su autor Leonardo Padura que "la tranquilidad y el socialismo juegan en equipos contrarios, y aunque la gente se acostumbra a todo, también se cansa". La simple lectura de la frase nos ayuda a explicar, en parte, el enorme deterioro que notamos a nuestro alrededor y que se manifiesta en la infraestructura de justicia, educación, y valores que se practica en Colombia; esta nueva estética es sin duda parte del legado de estos últimos 5 años que para este gobierno abyecto, las masas son simples herramientas que se usan para la toma del poder, y de ahí, que han afirmado muchas veces desde Cuba su intocabilidad frente a la Justicia, desconociendo las normas internacionales para que en corto plazo, se conviertan en un paréntesis en la historia de Colombia.
Nos tocará una tarea retadora y de elevado compromiso moral e intelectual: rescatar para nuestras próximas generaciones el respeto al conocimiento y el valor del esfuerzo. No hay otra forma de salir del atraso y corregir el rumbo hacia la Seguridad Democrática, sólo a través del atrevimiento conjunto de los colombianos con sentido de pertenencia lo lograremos.
