Las elecciones generales que se celebraron ayer Domingo 20 de Diciembre en España dejan un halo de clara incertidumbre sobre el futuro político del país ibérico.
Los resultados golpearon a las dos grandes formaciones políticas tradicionales, Partido Popular y PSOE, ante la irrupción de dos partidos emergentes el izquierdista y populista Podemos, que preside Pablo Iglesias y el centrista liberal, que dirige el joven catalán-españolista de 36 años, Albert Rivera.
En España a diferencia de Colombia, rige un sistema político de Monarquía Parlamentaria frente al régimen Presidencialista que existe en el país iberoamericano. Ello significa, que en la nación europea, en los comicios electorales se eligen los miembros de las dos cámaras parlamentarias, el Congreso de los Diputados, que es la principal y el Senado, que es secundaria. El Presidente del Gobierno lo eligen las mayorías parlamentarias que salgan de las urnas conformadas en el Congreso de los Diputados quedando el Senado como una cámara de validación legislativa, que en esta legislatura va a tener un carácter más decisivo que en otras ocasiones por lo que luego expondré.
El Congreso de los Diputados lo componen 350 escaños (curules en Colombia), de manera que la mayoría absoluta se logra con 176 diputados, es decir la mitad mas uno y el Senado, lo componen 208 escaños más los designados por las cámaras autonómicas directamente.
En el Congreso de los Diputados, cámara que fija las mayorías necesarias para elegir al Presidente del Gobierno, el PP de Rajoy obtuvo 123 diputados, el PSOE 90, Podemos 69, Ciudadanos 40, Izquierda Unida 2 y el resto de los 26 escaños, se lo repartieron diferentes formaciones nacionalistas catalanas, vascas, canarias, etc.
En el Senado, la mayoría absoluta la obtuvo el PP con 124 senadores sobre 208 que se eligieron ayer a lo que hay que unir los 21 escaños que tienen los conservadores por designación de los parlamentos autonómicos, en total el PP ostenta 145 senadores de los 266 que en total lo componen.
Los acuerdos parlamentarios en la decisiva Cámara Baja (Congreso de los Diputados) parecen complicados, vamos a analizarlos.
Parece que Rajoy como líder del PP, como fuerza más votada va a intentar formar gobierno, pero sus 123 diputados están lejos de los 176 escaños, que la Constitución española le exige para ser investido en primera votación, pues la ley requiere que en esa sesión el candidato debe tener apoyos de la mitad mas uno de dicha Cámara, por lo que tiene que ir a una segunda votación donde ahí, si le valdrían sus 123 escaños, como mayoría relativa, para lo que necesita que se abstengan el PSOE (90) y Ciudadanos (40),superando de esa manera a los 97 escaños que se prevé que se opondrían que serían los de Podemos (69),IU (2) y los nacionalistas vascos, catalanes y canarios (26).
El PSOE inicialmente va a dejar que el PP intente formar gobierno, con una posible que todavía no segura abstención, esgrimiendo razones de Estado a la par que domésticas, pues parece que no le interesaría pactar con Podemos, por riesgo de que puede ser fagocitado por los de Iglesias y además por claro espíritu de supervivencia política dado que perdió en esta cita electoral 20 escaños con relación a la de 2011, en la que consiguió 110. Así mismo, Albert Rivera, líder del centrista liberal Ciudadanos, también ha anunciado ya que se abstendría y que no votaría ni a Rajoy (PP) ni a Pedro Sánchez (PSOE).
No hay que olvidar, que en el Senado cámara de validación legislativa, la mayoría absoluta la tiene el PP como ya vimos, y el Poique hipotéticamente pudiera articular una mayoría con Podemos y Nacionalistas, las leyes y medidas aprobadas por dicha coalición parlamentaria en el Congreso de Diputados, podrían no prosperar ante la mayoría aplastante del PP en el Senado, por eso ésta sería otra causa para que el PSOE no iniciara una aventura de gobierno aliado con los grupos perdedores.
A ello hay que unir, que en estos momentos donde se está discutiendo la independencia de Cataluña, su propio electorado no entendería que para gobernar con muchas hipotecas parlamentarias España, llegase a pactar con los nacionalistas catalanes que desean el separatismo, por lo que ahí es más que probable que prime el sentido de Estado socialista.
Otro escenario poco probable que podría producirse es que si el PP se ve imposibilitado de conseguir mayorías y si el PSOE desee no pactar con Podemos ni con Nacionalistas, sería el verse abocados a la solución más drástica prevista legalmente y es que haya unos nuevos comicios electorales en el plazo de dos meses.
No hay que olvidar tampoco, que el líder natural del PSOE es el Ex Presidente Felipe González, quien ya se ha manifestado contrario a que el PSOE pacte con Podemos y con los nacionalistas catalanes, también se ha pronunciado de la misma manera Susana Díaz, Presidenta de la Comunidad Autónoma de Andalucía y a quien muchos ven como la próxima líder de un PSOE que con Pedro Sánchez, no han encontrado el revulsivo electoral que pretendían sus militantes y simpatizantes.
Ante este escenario, lo más probable es que Rajoy va a seguir siendo Presidente del Gobierno pero muy mediatizado y constreñido por los posibles pactos que pueda llegar a alcanzar y con la espada de Damocles encima de él de forma perenne ante la posibilidad de que a mediados de
La próxima legislatura, pudiera ser sometido a una Moción de Censura parlamentaria, en Colombia una revocatoria, para relevarle.
De momento Rajoy ha tenido la suficiente visión política y antes de estos comicios aprobó los Presupuestos Generales del Estado para 2016.
